14 de noviembre de 2023
Hacer ecoturismo implica no solo viajar con respeto y aprecio por la naturaleza, participando en actividades de bajo impacto ambiental en espacios naturales y aprendiendo sobre la flora y fauna local. También implica descubrir las tradiciones locales, entender cómo perduran en la actualidad, y apreciar la gastronomía de la región. De esta manera, el ecoturismo se convierte en un valioso aliado para preservar recetas ancestrales y promover el uso de productos locales, estableciendo un vínculo inseparable entre la belleza natural y el legado culinario de cada territorio.
Así, si hablamos de un producto típico del otoño, seguro que a todos nos vienen a la mente las castañas… ¡Qué ricas están asadas! Pero, al margen de las elaboraciones culinarias que se pueden preparar con el rico fruto del castaño, algunos de nuestros destinos Soy Ecoturista han querido compartir con vosotros algunas tradiciones muy curiosas y recetas ligadas a este tiempo de otoño.
¿Te animas a descubrirlas?
Los rehiletes en Sierra de Aracena y Picos de Aroche
Empezamos nuestro periplo en Huelva, concretamente en Sierra de Aracena y Picos de Aroche, donde hay más de 5.000 hectáreas de castañar. Un cultivo que tiene vinculadas profesiones, costumbres y vocablos que están profundamente arraigados en la etnografía serrana.
Una de las tradiciones que pasan de generación en generación son los rehiletes, en otros lugares también llamados abelorios o ciriales. A finales de noviembre, cuando la hoja del castaño cae, los niños elaboran los rehiletes, unos artilugios que realizan insertando esas hojas secas de castaños recogidas del suelo en una vareta de olivo. Estos se ponen a secar cerca de las candelas, para que la hoja esté completamente seca, y la noche del 7 al 8 de diciembre, en cada barrio de Aracena y La Umbría y el 24 de diciembre en Higuera de la Sierra, se hace una hoguera cuando anochece. Se queman los rehiletes, se asan castañas, los productos de las primeras matanzas, y se prueba el mosto del año.
Por supuesto, la gastronomía no puede faltar en estas fechas y nos proponen esta deliciosa receta de potaje de castañas.
Fotografía: Manuel García
Furanchos en Mariñas Coruñesas
Las castañas, en toda la geografía española, están muy ligadas al mes de noviembre y, especialmente a la festividad de San Martín o San Martiño, como se le conoce en Mariñas Coruñesas. La celebración de estas fiestas se remonta al año 1237, y en la actualidad se conservan costumbres ancestrales como afuranchar el vino en los bajos de las centenarias casas.
En estas fiestas se montan, dependiendo de la cosecha del año, de 30 a 35 furanchos. El recinto de Fiestas está cubierto con una gran carpa y durante los tres días de festejos la música no para desde la mañana hasta la madrugada, pudiendo así disfrutar de bandas de música, charangas, grupos tradicionales, juegos populares para niños y mayores, magosto, orquestas y puestos de venta de toda clase.
En Mariñas Coruñesas, el restaurante A Artesa da Moza Crecha nos proponen degustar en estas fechas su Pastel de San Martiño con Terrina de Matanza de Porco Celta y Velouté de Castañas, una deliciosa receta que elaboran a partir de dos recetas tradicionales de la zona que te invitamos también a conocer, el pastel de San Martiño y los Chicharrones de Cerdo Porco Celta.
Noviembre de castañas y vino nuevo en La Palma
Por último, no queremos dejar de incluir otra propuesta que nos lleva a La Reserva Mundial de la Biosfera de Palma. Allí, tienen una bonita tradición muy arraigada que vincula las castañas y el vino con la celebración de la festividad de San Martín y, aunque ésta ya se celebró hace unos días, el 11 de noviembre, seguro que te gustará conocerla.
Según nos cuentan desde ADER La Palma y desde el Consejo Regulador del vino, ambos en colaboración con la Reserva Mundial de la Biosfera La Palma, la celebración de San Martín viene asociada a las castañas asadas alrededor de la hoguera, el vino nuevo y los productos isleños, que van desde la carne a los chicharrones con gofio o el queso palmero.
Tradicionalmente, la noche del 10 de noviembre es la fecha en la que se estrena el vino nuevo en las bodegas tradicionales y, en La Palma, durante esa noche las bodegas se abren para jurar las pipas y barricas, una sencilla tradición que consiste en taladrar el barril para que brote el vino nuevo, algo que ya se ha convertido en todo un rito.
En esta celebración no faltan las castañas. Su recogida se lleva a cabo desde mediados de octubre a mediados de diciembre y es un producto muy habitual en la cocina tradicional canaria. Se puede encontrar en sopa, como relleno o guarnición y para acompañar los platos de carne, ave o pescado ya que sirve para realzar su sabor. También es utilizada frecuentemente en repostería y su uso se extiende incluso a la elaboración de tartas, mermeladas, helados o aromas para cremas pasteleras, entre otras exquisiteces para los más golosos.